domingo, 13 de julio de 2008

Morir


"A lo sonoro llega la muerte
como un zapato sin pie, como un traje sin hombre,
llega a golpear con un anillo sin piedra y sin dedo,
llega a gritar sin boca, sin lengua, sin garganta.
Sin embargo sus pasos suenan
y su vestido suena, callado, como un árbol."

Sólo la muerte
Pablo Neruda


Creo que esos versos reflejan tan bien lo que he sentido esta semana, la muerte, a veces nos hablan tanto de ella, y uno mismo piensa en el momento en que llegue la propia muerte o la de los seres queridos, y expone el tema con tanta resignación, con tanta lógica, habla de que es la única certeza que tenemos, y sin embargo llega el momento y uno se desarma, por más que la espere, por más que sea obvia su llegada, uno se desbarata.


Primero saber la noticia, es como un balazo al corazón, que luego comienza a sangrar profusamente y no hay nada, ni lógica, ni abrazos que logren contenerlo, esa debe ser la pena, profunda e incontrolable. Luego vienen momento de resingnación, donde uno recuerda que en realidad era esperada, pero despues uno se da cuenta que era esperada pero no bienvenida y que lo único que uno quería era atrasarla de cualquier modo. Cuando ya pasa todo el ritual que realizamos con nuestros queridos muertos, viene la desolación y la lluvia de recuerdos, que nos hacen pensar en todo lo que nos entregó esa persona, nos hace sentir el vacío de su ausencia, y parece que la pena agranda. Aun más curioso es que yo estoy en contacto con la muerte creo que día día, veo a la gente enferma, he visto gente morir, lo he pronosticado, pero esta vez yo estoy del otro lado, y se vuelve incomprensible.


Esta semana ha sido triste, la poderosa muerte invito a mi abuela, no sé que le ofreció, pero ella ha aceptado, todo ésto me ha hecho pensar y sentir cosas que hace mucho tiempo no sentía o no cuestionaba, cosas como que es lo que realmente muere, o si con la muerte se acaba todo, etc. La Mamy como le decíamos, es una imagen tan poderosa en nosotros, nos enseñó tanto, nos cuidó tanto y obviamente que nos retó harto también, pero creo que todos tenemos algo de ella que nos hará recordarla siempre. Ahora lo único que sé es que ella sigue viviendo en mi corazón y lo único que espero que ella lo haya sabido.